Seguridad en Piscinas
Si bien las piscinas brindan mucho placer a las familias, son un peligro significativo para las personas cuando se ignoran las normas de seguridad. La siguiente información se proporciona para su orientación y seguridad.
El uso de las piscinas en el complejo se divide principalmente en tres categorías, piscinas comunitarias, piscinas privadas utilizadas para alquileres vacacionales y a largo plazo, y piscinas utilizadas únicamente para uso privado.
Existe una normativa específica para las piscinas comunitarias. En caso de incumplimiento, los propietarios que integran la comunidad pueden ser responsables y sujetos a cualquier reclamación que se presente.
Los propietarios que eligen alquilar su propiedad también tienen requisitos para garantizar que se brinden niveles mínimos de seguridad. Dichos propietarios deben buscar más asesoramiento para asegurarse de que cumplen.
En el caso de las dos categorías anteriores no se realizan inspecciones. Solo cuando las autoridades reciben una denuncia, o en el caso de una lesión personal o muerte, se realizan inspecciones y se hacen preguntas. Además, los propietarios están abiertos a cualquier reclamo legal por parte del inquilino si no se proporcionan las normas de seguridad que resulten en lesiones personales.
Las normas de seguridad son de sentido común y pueden incluir lo siguiente.
Avisos de seguridad, marcas de profundidad del agua. aviso de calidad del agua, ayuda para el agua como un salvavidas o un anillo de agarre, botiquín de primeros auxilios, alarma de entrada de agua, cerca protectora, etc.
Las Piscinas Privadas, tienen muy pocos requisitos de cumplimiento y normalmente se limitan a su construcción. Sin embargo, las mejores prácticas indican que, independientemente de su uso, los propietarios deben proporcionar estándares mínimos para evitar daños a las personas.
En todos los casos, las piscinas deben estar protegidas para evitar que los niños pequeños accedan a ellas sin supervisión.